A mí me gustan las mojigangas barrocas, ¿y a usted?
- lauraragucci
- hace 1 hora
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No se trata de frutas tropicales, ni de dulces exóticos. Tampoco es el nuevo ritmo de moda. La mojiganga es una palabra castellana de antigua data, que se refiere a una obra teatral breve o danza, de carácter cómico, que solía representarse en los entreactos de las comedias o en las fiestas populares. Las figuras que participan en estas bufonadas son ridículas o extravagantes. Hasta allí, todo coincide, pero las mojigangas que nos ocupan hoy formaban parte de la liturgia en las fiestas máximas del catolicismo durante el Barroco Americano.
En el marco del primer Festival de Música Barroca de la Ciudad de Buenos Aires, celebrado en el Palacio Noel del barrio de Retiro, el ensamble Camino Real, creado ad hoc, presentó el espectáculo “Divinas mojigangas”. Ramiro Albino, su director, lo describió en su página de instagram como “músicas llenas de chispa y alegría, que me hacen feliz y que llevaba mucho tiempo deseando que sonaran”. Una peculiar unión entre lo popular y profano, con lo más solemne de las fiestas católicas del siglo XIX.
Albino convocó para este concierto a un grupo de artistas destacados. La soprano argentina Silvina Sadoly, que estudió técnica vocal con Nilda Hoffman, Mirtha Garbarini y Aida Fileni, destacó por su versatilidad y coloratura. El tenor chileno Gonzalo Cuadra interpretó muy histriónicamente una mojiganga atribuida a Melchor de Torres y Portugal titulada “Un juguetico de fuego”. El manuscrito fue encontrado en Perú y describe fuegos artificiales para la celebración del Corpus. Una partitura complejísima, tanto por su ritmo como por su melodía. El uruguayo Gustavo Reyna, intérprete de guitarra barroca y archilaúd, fue una pieza fundamental del ensamble.
El programa incluyó obras de Juan de Araujo, Gutierrez de Padilla y Fray Felipe de la Madre de Dios entre otros. Estos versos cómicos rimados hacían las delicias de todos los que concurrían a misa durante las festividades, a costa de parodiar a distintos grupos étnicos como gitanos y negros, de formas que hoy no serían políticamente correctas. El concierto inició con una catarata de risas, gracias a la estructura de fuga de la pieza “Ah siolos molenos”, en la que se parodia el hablar de los negros. A continuación interpretaron “Alto mis gitanas”, una mojiganga de Navidad. El concierto terminó con “Serenísima una noche” de Fray Gerónimo González de Mendoza, del siglo XVII, uno de los villancicos de Navidad más populares de la música hispanoamericana por su gran belleza sonora.
El concierto resultó un verdadero deleite. La sala del Museo de Arte Hispanoamericano estaba llena y daba un marco especial a este tan hermoso momento musical. Esperamos que el debut del Ensamble Camino Real no sea también una despedida y que pronto vuelvan a deleitarnos con su música.

Primer Festival de Música Barroca de la Ciudad de Buenos Aires
Palacio Noel – 10 de agosto 2025
Ficha técnica – Ensamble Camino Real
Sopranos - Silvina Sadoly y Griselda López Zalba
Contralto – Verónica Canaves
Tenores – Matías Tomasetto y Gonzalo Cuadra
Cello – María Jesús Olóndriz
Guitarra – Gustavo Reyna
Órgano – Demian Sielecki
Dirección musical – Ramiro Albino
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